…quizás soy crítica, quizás sólo estoy siendo realista…

…Pero esto nunca se termina, nunca se termina…. Recogemos uno y luego otro, y luego otro, y luego otro…. Nunca se termina esto de rescatar perros abandonados, enfermos y destrozados…. Nunca se termina…. Pero si ya es una labor sin fin, una utopía, un círculo de miseria y tristeza, después viene lo peor, lo más duro, lo más complicado, lo que termina con nuestras fuerzas: las personas.

Hay adoptantes estupendos, que te ponen las pilas, te ayudan a terminar de cerrar el círculo, rescate, recuperación, difusión, adopción, final feliz de una historia que empezó con un perro destrozado y deprimido.

Pero hay otras personas que no entienden nada. Y a esas personas que no entienden nada me quiero dirigir porque muchas son adoptantes o lo han sido porque esas personas ya han devuelto al perro o se están quejando de él, esas que nos tratan como si fuéramos sus sirvientes, que nos gritan y nos exigen esto o aquello, que nos reprochan y nos increpan, como si fuera nuestra obligación hacer todo por ellas, a esas personas les quiero decir que mejor os dedicáis a salir de compras o a tomar el té con vuestros amigos, porque estoy harta de ellas.

Si queréis adoptar un perro que sepáis que estos perros están enfermos, están emocionalmente machacados, humillados, están jodidos porque un humano como vosotros que tampoco entiende nada lo ha querido así. Debéis saber que si recogemos un perro con una enfermedad como la erlichiosis, la filariosis, la leishmaniosis, o simplemente una desnutrición, ese perro demorará en recuperarse y depende de sus adoptantes hacer que viva bien el tiempo que tenga de vida, porque no son enfermedades que pueden tener de hace dos días, sino años, un perro que ha padecido años alguna de estas enfermedades sin que se le trate, puede estar muy debilitado, y eso hay que tenerlo en cuenta. Un perro sin bazo siempre estará bajo de defensas, pero si no tiene bazo es porque le rescatamos y conseguimos que no se muera. Un perro con una pata rota, no es sólo eso, es un perro desnutrido, con huesos débiles por mala alimentación durante toda su vida, y con una exigencia física exagerada, ese perro se recupera lento y mal, por más esfuerzos que hagamos. Nosotros los curamos, hacemos los tratamientos que nos prescriben, no dudamos en gastar todo el dinero que no tenemos en intentar curarlos, y muchos se curan, pero son perros que han estado jodidos toda su vida, y necesitan años para recuperarse y aún así, quizás aparezcan enfermedades que no dieron la cara en su momento, porque no somos dioses, aunque continuamente estemos jugándole un pulso a la muerte.

Así que, como tantas veces os he pedido, si queréis perros sanos y guapos, buscaros la vida, porque aquí estos perros están como están, como mejor podemos recuperarles, y cada uno de ellos se lleva un poco de nuestra vida, así que por lo menos, tener la decencia de no hacer nuestra labor más difícil con exigencias ridículas, con argumentos estúpidos, con palabras vacías.

Queréis ayudar a un perro abandonado? Adóptenlo como está, como los cogemos nosotros cuando los sacamos de la calle. Y si tenéis sangre en las venas, curarle sus heridas, sanar su corazón, y buscarle una vida decente. Porque nosotros esto lo hacemos porque no podemos seguir viendo a los perros morir delante de nuestra cara, sólo pensamos en ellos.

Estoy segura de que estas personas que te dicen tan alegremente ‘lo devuelvo porque llora, porque se mea, porque me rompió un sillón, porque está enfermo, porque me mira raro, porque no puedo ir tranquilamente a tomar café, porque me quedé preñada, porque mi marido se cansó del perro, etc, etc, etc, ….’ Estas personas vomitarían si vieran de dónde y en qué estado estaba ese perro cuando le rescatamos, pero comprenderían que decirnos que el perro llora y por eso no lo pueden tener, es una soberana estupidez porque ese perro ni siquiera podía llorar cuando le rescatamos.